ELA IV: Tratamientos.

Hemos comentado ya que la ELA no tiene cura en sí, pero sí cuenta con un tratamiento para paliar los diferentes síntomas. 

Como en casi todos los tratamientos, su base es farmacológica. Uno de los fármacos más utilizados en el tratamiento es el riluzol. Este, en términos generales, va a retrasar el avance de la enfermedad y por lo tanto prologar la vida. 

Aquí podéis ver el mecanismo de acción de este fármaco.

Las personas con este tipo de patologías van a tener muchos problemas en la deglución por lo que es muy común que pierdan peso. Por ello, a la hora de establecer un tratamiento es recomendable que se recurra a un nutricionista. En casos avanzados, se necesita colocar dispositivos de sondaje para administrar la alimentación.

Por otro lado, para el paciente con ELA la fisioterapia es un engranaje principal debido a que su tono muscular va a ser el principal afectado.Se recomienda realizar ejercicios aeróbicos, estiramientos musculares, ejercicios varios (de resistencia, fuerza, etc.).

Es importante tener en cuenta que estos pacientes van a ver comprometida su respiración; por lo cual una buena educación sobre ejercicios respiratorios será muy necesaria y pueden facilitar la realización de los ejercicios al paciente.

Otras técnicas fisioterapéuticas, que se pueden aplicar en estos casos se ven recogidos en el siguiente enlace, muy recomendable http://www.fundela.es/ela/tratamiento-de-rehabilitacion/